Puede que a muchos tíos les guste el sexo maduras, pero pocos piensan en cumplir esa fantasía con la propia suegra. Menos la de este tío, que es una vieja gorda y bastante ajada, normal después de haber tenido varios hijos. Sin embargo, la señora tiene unas tetas enormes y bastante duras todavía, de esas que envidian muchas jovencitas. Sólo por eso, su yerno no podía quitarle la vista de encima; y para colmo, a la madre de su novia no le pasó desapercibido el interés. El final, como puedes suponer, fue follarse a la señora en el sofá del salón, a escondidas y cuidando de que nadie se enterara.